Cajongas y cabongos, las novedades en nuestra línea de percusión

En la fábrica de Manuel Rodríguez intentamos ser lo más sostenibles posible. Prueba de ello son la instalación de paneles solares para que el consumo energético provenga de renovables o el lanzamiento de nuestra línea Nature donde utilizamos menos barniz. Fuimos un paso más allá al llevarlo a la fabricación de los instrumentos, y creamos la guitarra C3 ébano, en la que el fondo y aros están hechos a partir de un prensado de virutas de madera obtenido de otras guitarras, y que imita al ébano.

Con las cajongas y los cabongos se ha desarrollado una idea similar, ya que es una forma de reutilizar trozos de madera que no se pueden utilizar para otras guitarras pero que están en perfectas condiciones. «Para el cuerpo utilizamos el mismo abeto que para los cajones flamencos, que le aporta un sonido muy dulce a la percusión», explica Manolo Díaz, lutier en Manuel Rodríguez desde hace 16 años y precursor de la línea de percusión. «Para las tapas ahora mismo estamos usando nogal o palosanto de India, aunque depende de las maderas que estemos utilizando en ese momento para fabricar guitarras», asegura Manolo.

cajongo-cromoLa cajonga MR es un instrumento que trata de hacer las veces de un cajón flamenco ‘de bolsillo’. Este prisma está diseñado para convertirse en el compañero inseparable de los amantes de la percusión. No hay una única forma de hacer sonar una cajonga MR. Sin embargo, la forma más natural es, estando sentado, colocarlo entre las rodillas y posicionar la tapa hacia el frente (perpendicular al suelo, como en el cajón flamenco).

cabongo-cromoEl cabongo es un curioso instrumento resultado de la unión del cajón flamenco con el exotismo del bongó. Los cabongos MR están construidos con dos cubos de abedul macizo unidos con una cuña del mismo material. Sus líneas rectas y su tapa recuerdan a los cajones tradicionales. Por otro lado, y también alejándose del clásico bongó afrocubano, la tapa no es de cuero, sino de palosanto macizo. Como curiosidad, además de la doble caja de percusión, como sucede en el bongó, los cabongos MR están huecos en su parte inferior.

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